"Que hobiese tan tupida ceguedad en aquéllos y mayormente en el bachiller Anciso, que parece que por sus leyes debiera más presto sentilla, que disponiendo de infestar, matar y captivar y robar a una gente apartada, en su tierra y casas segura, sin les haber ofendido, no menos que las otras inocentísimas, que ni los indios a españoles, ni españoles a los indios habían visto, hiciesen oración a Dios y hiciesen votos a la Virgen María del Antigua porque les ayudase y favoresciesen a perpetrar tan impías, tan crueles, tan violentas, tan tiránicas y de Dios tan ignominiosas y afrentosas injusticias! ¿Qué otra cosa era lo que allí, en aquellas oraciones y votos hacían, sino hacer o tomar por compañero a Dios y a su Madre Sancta María de los robos, homicidios y captiverios e infamias de la fe y sangre que derramaban y rapiñas que perpetraban partícipes? Daban a Dios y a su Sancta Madre oficios, que no son de otros propio, sino de los demonios y de sus ministros".
 
Fray BARTOLOMÉ DE LAS CASAS
Historia de las Indias

         En 1510 y en cumplimiento de la orden dada por el Gobernador ALONSO DE OJEDA, el encargado de la colonia de San Sebastián, FRANCISCO PIZARRO, dispuso salir de la misma, no obstante, en las inmediaciones de Calamar, encontraron la expedición del Bachiller MARTIN FERNANDEZ DE ENCISO, Alcalde Mayor de Nueva Andalucía, quien obligó a los colonos regresar a San Sebastián, lugar que encontraron reducidos a cenizas. Una vez desembarcados, los españoles fueron atacados por los indígenas residentes en los alrededores.

        Siguiendo la recomendación de un soldado llamado VASCO NUÑEZ DE BALBOA, quien conocía el área, desde la época de la expedición de RODRIGO DE BASTIDAS, el Bachiller ENCISO dispuso trasladar la colonia para el otro lado del golfo, donde los indígenas eran menos belicosos, la tierra fértil y el clima relativamente benigno.

        Las tierras a las que BALBOA hacía referencia, estaban gobernadas por el Cacique CÉMACO, quien ofreció gran resistencia a los españoles. Estos últimos, ofrecieron a la Virgen de La Antigua, que se venera en Sevilla, que de salir triunfantes en el encuentro bélico con los indígenas, darían su nombre a una población.

        Luego de vencer a CÉMACO y tras lograr un valioso botín, en septiembre de 1510, conforme al voto efectuado, los españoles fundan la población de Santa María de La Antigua del Darién. El éxito de al batalla contra el cacique, dio a BALBOA prestigio creciente sobre sus compañeros, lo que iba en detrimento de la autoridad del Bachiller ENCISO, quien se desempeñaba como Alcalde Mayor de Nueva Andalucía.

        Como quiera que ENCISO trataba con crueldad y avaricia a sus paisanos, una vez fundada la población de Santa María de La Antigua, el Bachiller fue depuesto de sus títulos y cargos para gobernar como lugarteniente de ALONSO DE OJEDA. Para ello, se argumentó que la población fue fundada dentro de la jurisdicción del Gobernador de Castilla de Oro, DIEGO DE NICUESA, y no dentro de los límites de Nueva Andalucía. Por tal razón, ENCISO carecía de autoridad en Santa María de La Antigua.

        Se constituyó en Santa María La Antigua, un gobierno municipal, eligiendo un Cabildo y designando a dos Alcaldes: MARTIN SAMUDIO y VASCO NUÑEZ DE BALBOA.

        El Cabildo elegido en Santa María de La Antigua del Darién, fue el primero en el continente americano, siendo el antecedente de la autoridad popular, electo libremente por el voto de los residentes. Esta institución jugó un papel fundamental dentro del movimiento separatista del siglo XIX.


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