Capítulo IX

Tauin ( 41 )

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Aaayyy...., bostezó Neftis dirigiéndose a Reneent, oye, tía, ¿no podríamos, tú con tus kristalizaciones y yo con mis estructuraciones sintéticas, hacer al alimón alguna cosa rara y de la máxima importancia para la Atlántida, por ejemplo, un cine teatralizado fisicalista que hiciera de paisaje duro? Como poder poder poder... yo creo que podríamos, dice Renenet dando relumbrones con su zafirote de su dedo índice, un paisaje básico y primordial sobre el que se desarrollaran los seres muebles, ¿sí?, incluidos los árboles. Eso es, confirma Neftis, os cuento mi pensamiento: He observado que la biodiversidad se ha pasado de la raya por todas partes, -¡por todas partes!-, y que hay ya chinches de millones de géneros y especies, y otros bichos aun más menudos.

(A ésta se le está subiendo el néctar a la cabeza, le susurra Shed a Tut en el oído); y yo me digo, prosigue Neftis, ¿que para qué queremos tantísimos bichos? Para incordiar, nada más que para incordiar, es terrible, reconoce Renenet rascándose detrás de una oreja; tú estás proponiendo una economía de la superviviencia. No exactamente de la supervivencia, objeta Neftis con una cierta desgana, sino de la razonabilidad ontológica de la biología. Hasta el día de hoy esto ha sido una viña sin vallado, dice Ra interviniendo aburrido en la conversación, y a menos que nos planteemos una espera de por lo menos mil millones de años para ver en qué acaba esto, tengo la impresión de que estamos perdiendo el tiempo dando palos de ciegos en este astro. ¿O sea, que tu moción es desinsectizar la Atlándida?, supone Shed. Más o menos, dice Ra, podemos dejar las mariposas de amplias alas, bellos colores y cuerpo grácil y estilizado, y sansacabó. Oh, sí, oh, sí, dicen Renenet y Neftis juntamente y en voz de tiple y soprano, sólo mariposas de amplias alas, bellos colores y cuerpos gráciles y estilizados, tararíííííí... tararóóóóó..., y pajaritos lindos y canoros, y aves del paraíso, tararóóóóó... tararííííí... Oóóooh... y dulces bambis y unicornitooooos... y todo lo demás que sea bonitooooo...

...Oooooooh.....

¡...Podrííííaamoooos, sugiere Raaaaa, la Naturaleeeeza suplantaaaaar... por un Sueeeeeño Ideaaaal, perfeeeecto y civilizaaaaadoooo...! Eso eso eso es lo mejooooor, dice Shed, lo mejor de lo mejooooor, y dejarnos de pampliiiinas biolóoooooogicas... y de bichejoooos indeceneeeenteees... !A beber, a beber y a olvidaaaaar... dice Tut, las peeeenas y el doooloooor, que de biiiichos ya está bieeeeeen, y ya hace faaaalta algo suuuuuperiooooor! ¿Como quéeeee? pregunta Sheeeeed...

A mí desde luego como las máquinas mentales, dice Renenet, no se me ocurre nada mejor. Ji ji ji, la apoya Neftis, ¡sueños...: si está clarísimo! ¿Qué es una ensoñación sino una geometrización dinámica de un arquetipo? Pues de eso es de lo que se trata, -de geometralizar armónicamente a la realidad y de desarrollarla no a partir del Caos como hasta ahora, sino de un Módulo-.

Pues no estás tan borracha como creíamos, dice Ra, un Módulo perfecto pero abierto puede reinsertarse consigo mismo indefinidamente, y siempre formará Armonía, por más que se desarrolle. ¡Eso es lo que faltó, joder, dice Tut, en la anterior Creación!, un Módulo..., confirmó pensativo. Quedaron todos un rato en silencio, bebiendo a pequeños sorbos de sus copas de néctar, que lógicamente se iban rellenando solas a partir de su electricidad estática solidificada. "Éter domesticado", solía decirse del efecto de transferencia por transustanciaciación y cambio de estado. En el fondo todo es lo mismo y todo tiene un mismo sustrato final continuo, -las estrellas, las galaxias, las rocas y las montañas, el agua y el aire, la luz y el sonido, la materia orgánica y el pensamiento, la Atlántida ideal, los arquetipos...-, y todo se transforma y se transfiere, o bien caóticamente como hasta ahora, o bien en base a un Módulo permente, como en cualquier momento puede hacerse.

"Eter domesticado", siguió pensando Ra y trasmitiendo a las otras mentes, un Eter condicionado al Tetraedro Abierto...; Tenemos así al Espacio en primer lugar, dice Tut reflexivamente, y a la integración tetraédrica continuada en forma de Tiempo, y su vacío es la Consciencia; ¿por qué se deformaría todo?

La pregunta flotó en el aire durante un ácrono momento; La Curvatura quizás, apunta Renenet, que verdaderamente la odiaba, la resistencia a la exactitud, el miedo a salir y su consecuente masificiación interna. La biología, dice Tut, es Miedo. Más exactamente Horror, corrige Ra, -KUK-, Horror al entorno necesariamente hostil porque todos sus seres se hallan en el mismo caso. El Horror total nos kristaliza, pero el Horror Atenuado, el Miedo, nos vuelve agresivos y violentos; nos es imprescindible encontrar un término medio, un equilibrio entre el Horror y el Miedo, para que la Geometría Dinámica pueda sólo curvarse armónicamente...; La única y lógica y obvio solución, revela Tut, es trascendenr a la Muerte, pasar a su través como un rayo de sol pasa a través de un cristal diáfano, pues sin Muerte no hay curvatura biológica.

Y por tanto tampoco hay deformación en la geometría dinámica, concluye Shed. El Horror es Primordial para mantener la tensión y la exactitud en el campo mórfico y en su subcampo morfogenético, pero no es el único ente Primordial: están también NUN -los Cienmil-, HUH, Sustancia de Irrealidad que llamamos ahora Éter, y NIUAU-AMÓN -nosotros mismos, la Consciencia del Fundamento-. El Horror -KUK- se compensa con los otros tres. Es nuestro propio desarrollo mental lo único que falta para que el Horror sea compensado y surja Atlantis del seno insondable de La Nada que nos envuelve.

Hay que ver lo que estoy aprendiendo esta noche, dice Amihaf.

M a n ú
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