IX. LA CONDICION FEMENINA Y ETICA CRISTIANA

 

Para comenzar hablando de la condición femenina debemos primero ver lo que entendemos por femenino. Desde el punto de vista teórico de la "condición femenina" se presentan tres referencias: a) el sexo (base bio-genital); b)vida humana, vivencia del proyecto de vida como mujer; y c) la referencia de la ideologización, que al tomar en cuenta las dos referencias anteriores, se proyecta "mediante la configuración ideológica y simbólica de lo femenino".

 

a) Diferenciación sexual

 

La diferenciación de la sexualidad humana se concreta en el sexo hormonal y cromosómico. La "mujer" en la especie humana se constituye por medio de la fórmula cromosómica 44A+XX debido a la presencia del ovario y la actuación general de hormonas sexuales femeninas. El concepto teórico de la condición femenina se configura por la realidad de ser "la mujer" dentro de la especie humana.

 

b) La Mujer en cuanto a proyecto vital humano

 

La diferenciación sexual produce diferencias en los ámbitos en que tenga significación la sexualidad.

 

Existe un proceso mediante el cual la mujer biológica se convierte psicológicamente en "mujer". El cuerpo según sea hombre o mujer, tiene un papel capital cuyo sentido del cuerpo femenino o masculino, interpretará la inserción social durante los primeros años.

 

El ser Mujer pertenece no solo al aspecto psíquico sino también al sociocultural. Al presentar las formas culturales femeninas, estudios de antropología cultural han resaltado la condición histórica de ser mujer. A este nivel de desarrollo de "Mujer", es donde la ética realiza su aporte para orientar las realizaciones históricas de la condición femenina.

 

c) Estructura ideológica y simbólica de lo femenino.

 

Las categorías femenino y masculino tienen una gran capacidad ideologizadora y simbolizadora. El sexo regula y enmarca inmediatamente la clasificación de las expectativas y modo de ser en la vida humana.

 

FUNCION CRITICA DE LA TEORIA ETICA SOBRE LA MUJER

 

Una de las realidades en las que ha existido evidente manipulación ética, es en la visualización de la mujer. La ética ha proyectado sobre la mujer, construcciones morales erróneas a lo largo de la historia y que han manipulado su condición femenina (^ethos) en bien de intereses particulares.

 

La manipulación consiste en deducir una serie contenidos éticos a partir de una concepción errónea aceptada por verdad. El error queda así asumido como verdad. A través de la historia muchos errores se han aceptado como verdades básicamente por ignorancia...la visión de la mujer es uno de ellos... solo que esta vez es "Por ignorancia culpable", es decir en consciencia, se aplicaron concepciones éticas erróneas a la mujer. No olvidemos que muchas síntesis morales occidentales fueron construidas en la época pre-científica, en lo que respecta a los conocimientos de la sexualidad. Como ejemplo de estos errores biológicos traspasados a la categoría ética en cuanto a la mujer podemos mencionar: "La mujer es un hombre defectuoso" (según un axioma latino de la edad media); "que la mujer ocupa un papel pasivo en la generación"... los dos factores de la procreación eran el semen paterno y la sangre materna. Por ésta, el embrión se formaba a partir de la fuerza activa de dicho semen; por último, que en virtud de útero de la mujer se define tanto su belleza física como su destino (ss.XIX).

 

Otra manera de manipulación ética de la mujer consiste en "leer" sus datos biológicos con un "prejuicio preconcebido". Se trata de definiciones interpretadas a partir de la concepción de categoría de ser humano inferior (o imperfecto) explicadas por su sexualidad biológica, y que además explican la concepción psicológica a partir de la cual se proyecta el ^ethos del hombre y de la mujer. En efecto, la psicología moralizante ha condicionado notablemente el comportamiento de la mujer.

 

Además, existe la manipulación ética a partir de la reducción de la mujer al concepto de objeto de pecado para el hombre.

 

FUNCION CONSTRUCTIVA DE LA TEORIA ETICA SOBRE LA MUJER

 

La mujer puede ser relacionada con la ética en las tres dimensiones de ésta: En cuanto a producción científica (ethica docens), en cuanto moral vivida (ethica utens) y en cuanto a contenido moral(utopía moral).

 

Si la historia de las mujeres, la ética, la ética de la mujer, la ciencia ética, han sido realizadas y definidas por los hombres, entonces, el verdadero sentido de las cosas aun se desconoce. El hombre ha representado una realidad masculina de la mujer, ha representado una historia ética sesgada, ha interpretado a la mujer de manera sesgada. Para una visión verdadera falta incorporar lo que las mujeres tienen que decir al respecto, en el entendido de respetar y oír su aporte y asimilarlo en nuestro mundo de prejuicios para sacar una conclusión más general y verdadera. Si el hombre ha escrito la historia femenina (prejuiciada), entonces el punto de vista masculino prevalece. Si lo hace la mujer, entonces prevalece el sentido femenino. Se reconoce pues que falta de una parte y que corresponde a la dualidad, de lo contrario queda incompleta la construcción del sentido ético, moral e histórico de la mujer. Ambas realidades humanas existen. La práctica solo ha reconocido a una. "En efecto, podemos decir que una de las virtudes de la mujer es que en un momento dado, puede pensar como hombre, pero nunca el hombre podrá pensar como mujer".

 

La moral formulada ha de ser planteada desde un condición dual. Por lo mismo deberá contener las dos dimensiones de la realidad humana: los problemas han de ser resueltos desde ambas perspectivas.

 

El sentido y condición moral de la mujer puede estar condicionada a la diferencia sexual. También tendrá gran influencia el seno familiar como fuente primaria de su moralidad, luego se vigila la inteligencia, medio social, educación, religión, cultura y otras que enmarcan una moral a partir del referente "moral natural".

 

 

LA MUJER EN CUANTO CONTENIDO ETICO

La pregunta en cuanto al contenido ético de la mujer se concreta en la forma de entender éticamente la relación primaria del hombre y la mujer (los sexos) en la especie humana. El universo moral de la mujer estará condicionado a la ética de la relación de ambos sexos. Esta configuración primaria repercute además en la visión ética de toda la sociedad humana. El hombre no está llamado a vivir en soledad. Para el cristiano, Dios crea a la mujer, compañera del hombre pero bajo una condición de igualdad (hijos de Dios). La relación de igualdad conduce a la integración de las condiciones femenina y masculina para encontrar la complementariedad, como lo establece Gen2,25 "vendrán a ser los dos una sola carne".

 

El contenido ético de la mujer, por lo tanto, se reduce a la igualdad recíproca (constituida por la relación) e integradora (constituyente de la relación).

 

LOS PRINCIPIOS BASICOS DE LA ETICA FEMINISTA

 

Para hablar de ética feminista debemos primero hablar de su condición femenina. Para comprender ésto debemos diferenciar los conceptos : a) sexo (femenino vs masculino) y b) género (femenino vs masculino). La definición femenina se define inicialmente a partir de su sexo (la diferencia sexual es la gran diferencia de toda la especie humana). La ética femenina (si es que existe) es aquella realizada por la mujer, formulada desde la perspectiva de la mujer. La ética feminista, es la denuncia de la asimetría sufrida por la mujer por su condición femenina (a partir de la alienación causada por el "sexismo"), y la búsqueda por la reivindicación de la dignidad de la mujer y de su igual derecho a la realización en todos los aspectos humanos. La marginación realizada por el hombre desde siempre a la mujer ha sido uno de los errores histórico impunes y carentes de ética más grandes cometidos por la ignorancia jamás contada).

 

Tres son las principales formas de feminismo que se presentan en la actualidad y con las que la teoría ética puede sentirse vinculada:

 

Feminismo de la igualdad: Reivindicación de la mujer en su calidad de ser humano (mujer igual al hombre). Feminismo de la diferencia: Diferencia en cuanto a originalidad exclusiva y no referenciada. Feminismo de la liberación: Realza la vinculación de la opresión de la mujer; propone el ideal más en la liberación que en la libertad ("busca no tanto mujeres libres pero liberadas"); solidariza con el movimiento de liberalización de todos los grupos; insiste en la pérdida social histórica de su condición humana.

 

Cabe preguntarse ¿porqué una ética feminista?, ¿acaso el concepto universal de la ética no circunscribe a la mujer?. De ser así, en la práctica no existiría una conciencia feminista con relevancia moral incuestionable que critica la teoría moral cuando denuncia la pretendida universalidad en que se sustentan las prácticas políticas, sociales, éticas y religiosas de nuestra cultura.

 

Gilligan propone una noción de moral que aplicada al estudio del desarrollo humano diferencia los modelos de "moral de la justicia"(propia de los hombres) y "moral del cuidado" (propia de las mujeres). Su valor radica en el aporte de haber subrayado la importancia de los emocional (sin negar lo racional) y de la preocupación o cuidado (sin negar la justicia). La pregunta es si la estructura diferenciadora de estos modelos no ejercen en sí un error ético ¿porqué los hombres poseen el monopolio de la justicia o las mujeres los cuidados?. Al valorar Gilligan más la "moral del cuidado" opina que el desarrollo moral de las mujeres denota una mayor perfección cultural (?).

 

En resumen, queda evidenciada la concepción limitada del hombre frente a la mujer a través de la historia de la humanidad. Desde el punto de vista cristiano, el hombre ha pecado en cuanto a su marginación, y tendrá que responder ante Dios por ello. Las diferencias se sienten aun hoy (siglo XXI), entre otros, en el plano laboral, en el cuidado de los niños, en los deberes del hogar, en las opiniones profesionales, etc. Eticamente el hombre y la mujer son iguales. Si existe alguna diferencia en cuanto a las perspectivas de las cosas, valores o puntos de vistas femeninos y masculinos, han sido producidos fundamentalmente por la educación recibida a partir del seno familiar, con mayor énfasis que aquellos producidos desde su perspectiva condicionada a su sexualidad (ejemplo: su sentido materno) .